Cristina Del Campo, cuenta en el InfoRedit cuáles son sus retos, proyectos y visión como directora General de AINIA
- Dirigir una organización como AINIA, con más de 200 trabajadores, 185 proyectos anuales de I+D y casi 15 millones de euros de ingresos parece, a priori, un gran desafío. ¿Cómo asume este gran reto?
Con mucha ilusión y, también, con mucha responsabilidad. Me siento una privilegiada por estar al frente de una organización con tanto talento y bondad y, al mismo tiempo, con un papel tan importante que jugar, como es trabajar para acercar la tecnología a la empresa con el objetivo de mejorar su competitividad.
En lo laboral, no preferiría estar en ningún otro sitio. Es un gran desafío profesional, sí, pero tengo la sensación de que me llega en el momento vital, personal y profesional adecuado y, sobre todo, que lo asumo acompañada por el mejor equipo técnico y humano.
- Se incorporó a la organización hace casi un año lo que, seguramente, le habrá permitido realizar una transición sosegada. ¿Qué ventajas ha tenido este aterrizaje “suave”?
He podido conocer a fondo la organización, en todas sus facetas: tecnología, mercado y personas. Y eso, es un gran avance para identificar las líneas de trabajo prioritarias y poner en marcha iniciativas.
También han sido meses enriquecedores desde el punto de vista humano, porque he tenido la oportunidad de conocer a muchas de las personas que forman parte de la organización. Estoy fascinada del equipo que hay en AINIA; un colectivo muy comprometido con el proyecto, con ganas de crecer y construir futuro. Este sentimiento de pertenencia y de profesionales motivados nos hace imparables.
Finalmente, estos meses me han permitido conocer más a fondo los sectores para los que trabajamos, especialmente el alimentario, así como las tecnologías por las que más estamos apostando. Esto ha sido muy importante para mí pues, pasar de desarrollar las tareas de representación de los Institutos Tecnológicos de la Comunidad Valenciana, a la gestión pura y dura de uno de sus centros referentes, requiere de un conocimiento detenido del mercado.
En definitiva, ha sido un proceso tranquilo y muy rico en aprendizajes, y mi sensación, es que ha pasado muy rápido.
- ¿Qué le ha aportado su experiencia en REDIT a la hora de acometer este proyecto?
Mi paso por REDIT me ha permitido conocer en profundidad el modelo valenciano de Centro Tecnológico, tanto en términos absolutos como relativos puesto que, los 9 años al frente de la Red, me han llevado a adquirir una gran experiencia y conocimiento de los centros tecnológicos y de los modelos de centros tecnológicos que existen en Europa y en el mundo. Un conocimiento que ahora me es muy útil al frente de la Dirección General de AINIA.
Han sido años muy intensos de trabajar con constancia, en todos los ámbitos, para que la sociedad valenciana conozca y valore que tiene una red de institutos tecnológicos de referencia en España y Europa y de la que deberíamos sentirnos muy orgullosos.
También ha sido una gran experiencia de gestión, además, en unos años críticos. Experiencia fundamental que ahora me permite asumir este nuevo reto con el convencimiento de que AINIA está preparada para convertirse en un centro de referencia internacional, aumentar su posición en el ecosistema de innovación europeo y abrirse a otros sectores, nuevos mercados y tecnologías.
- ¿Cuáles son las principales acciones que va a abordar en el corto plazo?
Ahora mismo estamos inmersos en la elaboración del plan de actividades y el presupuesto para 2020.
En clave interna, acabamos de lanzar el proyecto Bitácora, cuyo objetivo es mejorar la unidad dentro de la organización, como la medida del compromiso de nuestros profesionales con el propósito de AINIA. Este proyecto nos llevará a revisar la estructura organizativa y varios de los sistemas de la organización, para avanzar hacia un modelo más sencillo donde la toma de decisiones sea más ágil.
También estamos trabajando en identificar nuevos modelos y formas de valorizar nuestros activos tecnológicos. Es un camino que debemos explorar en el corto y medio plazo. Y hemos intensificado nuestra actividad internacional con empresas, especialmente en el ámbito europeo, que es nuestro mercado natural.
- AINIA es un centro referente a nivel nacional e internacional. ¿Cuáles han sido las claves del éxito?
AINIA es un centro que cumple su misión y que además lo ha hecho a lo largo de sus más de treinta años de historia. Esa misión es cooperar con la empresa, impulsando su competitividad, con investigación, desarrollo tecnológico e innovación. Esta creo que es la principal clave de nuestro éxito. Esto nos ha dado una credibilidad en el mercado que tiene como resultado un elevado nivel de fidelidad de empresas asociadas y clientes. Unas 1500 empresas clientes anuales, de las que la mitad son asociadas, hacen que AINIA sea hoy uno de los centros tecnológicos europeos con mayor base social empresarial.
Además, AINIA siempre ha buscado la excelencia, lo que le ha llevado a rodearse de los mejores. Tenemos un equipo humano muy preparado y comprometido. Por otro lado, somos un referente en algunas de las tecnologías que hoy son fundamentales para el avance de los sectores a los que nos dirigimos, como la biotecnología, las tecnologías medioambientales, los fluidos supercríticos, la microencapsulación, las tecnologías del envase o la fotónica, entre otras.
Hemos ido dando pasos y avanzando poco a poco, consolidando cada etapa. Añadiría, desde el punto de vista de la gestión, que AINIA ha sabido entender e interpretar a la empresa en cada momento, adaptándose de manera flexible a cada necesidad. Este saber interpretar el entorno y anticiparse a los cambios del contexto económico y social en el que las empresas se mueven, ofreciendo soluciones tecnológicas adaptadas, creo que es otra de las claves por las que se nos considera un centro de referencia. Las empresas sienten que las entendemos, hablamos su mismo lenguaje.
- Hablar de AINIA no es solamente hablar de alimentación. ¿En qué otros sectores están trabajando?
Nuestras tecnologías son transversales, por lo que aportan un elemento diferencial a otros sectores más allá del agroalimentario, como el cosmético, el químico y el sector salud, principalmente. Estos tres sectores están presentes en nuestros planes de crecimiento.
Además, el packaging ha sido desde siempre una línea de especialización en AINIA, principalmente centrada en el envase alimentario, pero cada día más demandada y abierta también hacia estos otros sectores que acabo de mencionar, que valoran especialmente nuestro conocimiento de la interacción del envase con el producto y nuestras soluciones integrales que equilibran seguridad, sostenibilidad, costes, comodidad y conveniencia para el consumidor.
De la misma forma, nuestra relación con el sector medioambiental viene casi desde nuestros inicios. Somos un Centro de referencia en el ámbito de la Bioeconomía. Al respecto, fuimos pioneros en Europa en el desarrollo tecnológico de las biorrefinerías y eso constituye un elemento diferencial y una línea de trabajo que va adquiriendo importancia en múltiples sectores. Y nosotros estamos ahí para aportar soluciones tecnológicas finalistas en temas de biomasas, recuperación de aguas industriales y urbanas, producción de bioenergía a través de biogás o biometano, aprovechamiento de subproductos y residuos para la producción de bioplásticos, tecnología de microalgas, lemna…
Por último, cada vez colaboramos más con el sector agropecuario, con el que hemos tenido siempre una relación muy estrecha dada su vinculación con la cadena de valor alimentaria y que ahora, en un momento clave para el desarrollo de la agricultura de precisión, nos considera uno de los agentes tecnológicos que más le pueden aportar.
En definitiva, nuestro planteamiento de diversificación sectorial es claro. En AINIA trabajamos toda la cadena de valor del alimento y, desde esa cadena, somos capaces de interconectar otras cadenas de valor estrechamente vinculadas, generando así en nuestros proyectos ecosistemas e interconexiones muy interesantes, no solamente desde el punto de vista del desarrollo tecnológico, sino también de la innovación estratégica, la identificación de nuevos nichos de mercado y el surgimiento de nuevas relaciones de valor para todas las empresas y entidades que colaboran con nosotros.
Conviene recordar, por último, el profundo conocimiento que tenemos del consumidor a través de AINIA Consumer, área desde la que hacemos investigación de mercados para la innovación y nos aseguramos de que nuestras soluciones, sean para el sector que sean, estén alineadas y den respuesta a las necesidades y demandas de los ciudadanos.
- ¿Goza de buena salud el sector de la alimentación en la Comunidad Valenciana? ¿Cuáles son las principales demandas de las empresas?
Nuestra opinión es que sí y los datos lo corroboran. El sector de alimentación y bebidas es la principal industria manufacturera de nuestra Comunidad, el motor principal de nuestra economía. Se trata de un sector estable que, incluso en momentos de crisis, ha seguido generando actividad y empleo. No obstante, vive también la necesidad de orientarse hacia un crecimiento de valor, penetrando en nuevos nichos y alcanzando mayores volúmenes de exportación.
Cuando los profesionales de las empresas agroalimentarias hablan con nosotros, lo que nos transmiten es que la rotación de producto en los lineales es cada vez más rápida, la irrupción del comercio digital es oportunidad y riesgo a la vez, el consumidor es infiel y muy exigente, se mueven en una cadena de valor más compleja cada día donde tienden a configurarse redes de cooperación que obligan a avanzar hacia una innovación más abierta y distribuida, la demanda tiende a la personalización y a dar un producto de más valor diferencial… Todo ello está obligando a las empresas a reinventarse.
Por eso la innovación y el desarrollo tecnológico, hoy, juegan un papel fundamental en las empresas del sector de alimentación y bebidas y de bienes de consumo en general; están en las reuniones de la alta dirección de las compañías todos los días. Y nosotros, como centro tecnológico al servicio de la empresa, queremos estar con ellos.
- ¿Qué papel juega AINIA ante los nuevos retos de futuro que se presentan ante las empresas?
Ante los retos de futuro que mencionaba en la respuesta anterior, el papel que juega AINIA es el de un aliado tecnológico y de innovación. Podemos ser un recurso, alguien que aporta a la empresa eficiencia operativa, y podemos ser también un partner, alguien que aporta visión estratégica de la innovación y la tecnología y coopera con la empresa a lo largo del tiempo.
Podemos hacer una innovación disruptiva, asumiendo riesgos e identificando nuevos segmentos de mercado, o podemos hacer una innovación incremental. Ambas son necesarias para la sostenibilidad de cualquier negocio.
Aportamos tecnología para acercarla a la empresa. Pero también realizamos investigación de mercados para la innovación; tenemos uno de los laboratorios referente en seguridad alimentaria de España; somos uno de los especialistas más reconocidos en legislación alimentaria; ofrecemos servicios a maquila en extracción supercrítica; nuestra formación y asistencias tecnológicas son referenciadas constantemente y fomentamos el conocimiento abierto y la innovación colaborativa mediante AINIA NETWORK.
En definitiva, aportamos soluciones integrales para la innovación. Cubrimos cualquier necesidad y estamos en toda la cadena de valor.
- ¿Cuánta importancia tiene para usted la colaboración?
La colaboración es fundamental. En mi opinión, el paradigma de competitividad actual pasa por la innovación y la colaboración. Nuestro tamaño nos obliga a especializarnos y a colaborar con aquellos que mejor complementan nuestro conocimiento en cada ámbito.
La colaboración forma parte de nuestra cultura corporativa y de nuestra misión. Por ejemplo, nuestros proyectos nacen de equipos multidisciplinares en los que colaboran investigadores de diversos departamentos y especialidades porque, si queremos dar soluciones finalistas a nuestros clientes, necesitamos interconectar especialidades diversas.
La colaboración es clave para el desarrollo de nuestra política de alianzas y de crecimiento. Siempre ha sido un elemento diferencial de AINIA pero, si cabe, en el futuro lo será aún más.
- ¿Qué opinión le merece el trabajo que se desarrolla en REDIT?
La tarea de REDIT es fundamental, tanto para los Centros Tecnológicos, como para el conjunto del sistema valenciano de innovación.
Es imprescindible defender y poner en valor de forma conjunta el modelo valenciano de Centro Tecnológico, como un modelo eficaz en el apoyo a la innovación empresarial, ante el conjunto de agentes públicos y privados del sistema de innovación. Los centros tecnológicos deben ser conocidos y reconocidos, para entender su importante papel y, también, sus particularidades en relación con el resto de agentes.
Pero, además, la labor que desempeña REDIT como “think tank” es imprescindible, generando de forma constante conocimiento sobre la innovación y referenciándose respecto a otros sistemas de innovación del mundo.
En resumen, creo que REDIT es hoy en día una entidad reconocida y con una trayectoria solvente, y estoy convencida de que en el futuro seguirá jugando un papel central en el sistema valenciano de innovación, gracias a un equipo estupendo de profesionales y a un gran presidente.